Rayador - alimentación


El rayador es un ave de hábitos gregarios. Es común verlos en bandadas formados en la costa todos mirando hacia el mismo lado y partir en tandas en busca de alimento. Lo hace preferentemente a la noche. Se alimentan de peces pequeños y crustáceos en aguas tranquilas y poco profundas en marismas, lagunas y ríos. Aquí es un visitante poco frecuente.
Rayador
28-10-06 © Hugo Hulsberg
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares

El rayador busca el alimento volando. Vuela en línea recta con la cabeza inclinada hacia abajo y el pico abierto. La parte inferior del mismo, semihundida en el agua y la superior, fuera del agua. Las alas no bajan por debajo de la horizontal para que no se mojen. Una posición "exigida" que demanda más energía.
Al toparse con la presa el rayador cierra el pico instantáneamente, dobla la cabeza hacia abajo y atrás para asegurarla y tragarla. Esta secuencia de movimientos requiere coordinación, maniobrabilidad y precisión.además de músculos del cuello muy fuertes que absorben la fuerza del impacto que impide que se quiebre el cuello
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
En una de las pasadas pudimos observar el movimiento de la cabeza hacia abajo para atrapar la presa aunque no queda claro si lo logró.

El pico es muy curioso. Es la única ave cuya mandíbula inferior es más larga que la superior. El pico es levemente decurvado, rojo en la parte proximal y negro hacia la punta. La mandíbula inferior está aplanada lateralmente. Al ser tan angosta deja una raya marcada en el agua, lo que le da el nombre al ave y a la técnica. Encaja en una ranura de la mandíbula superior. Ésta es ancha en la base y se angosta hacia la punta.
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares
Rayador
07-10-06 © Roberto Ares
La cubierta córnea del pico crece en forma incesante, en especial, la mandíbula inferior. Adaptación vital para el rayador ya que regenera el desgaste producido por la fricción del agua y por las fracturas. Mantener esta mandíbula extra unos centímetros debajo del agua amplía la profundidad de la captura, pero al mismo tiempo conlleva el riesgo de chocar contra objetos sumergidos.
Una articulación reforzada en la mandíbula y una masa muscular engrosada son cruciales para mantener la mandíbula estable.

Siempre se creyó que esta técnica era táctil y no visual sobre la base de que el rayador posee una gran cantidad de terminales nerviosos en la mandíbula inferior que detectan el alimento. Hay opiniones divergentes en cuanto a si el rayador ve y luego raya o raya en forma indiscriminada. Todavía no está claro el papel que la visión juega en la búsqueda del alimento. Estudios recientes muestran que la topografía del campo visual del rayador no coincide con la de los forrajeros táctiles. A diferencia de estos, la punta del pico cae dentro de la región binocular tanto al estar cerrado como abierto al rayar. De este modo el rayador puede controlar el posicionamiento del pico con respecto a la superficie del agua e identificar la presa una vez que fue sacada de la misma. Este resultado explica la otra técnica usada por el rayador para obtener comida. Consiste en clavar el pico en el agua para atrapar la presa. Puede no ser una escena tan glamorosa como la anterior, pero es una alternativa viable.
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares
Rayador
15-07-06 © Roberto Ares
Este rayador estuvo explorando la costa en busca de comida pero sin rayar. Volando a baja altura, maniobrando en el aire y descendiendo de ser necesario.