Estábamos en el extremo sur de la Laguna de los Coipos, pegados al acceso Brasil cuando Ignacio Graciá divisó a este macá comiéndose una rana muy pero muy grande. En muy poco tiempo la acomodó y se la embuchó. La secuencia, aunque con fotos lejanas, es impresionante.
Estábamos en el extremo sur de la Laguna de los coipos, pegados al acceso Brasil cuando Ignacio Graciá divisó a este macá comiéndose una rana muy pero muy grande. En muy poco tiempo la acomodó y se la embuchó. La secuencia, aunque con fotos lejanas, es impresionante.
Un macá en plumaje nupcial (raya negra en el pico, garganta negra y anillo ocular) y llamando. Un comportamiento típico en la época de reproducción. Y nos enteramos que no estaba solo. Sally nos comentó que el sábado vio a tres individuos en Coipos llamándose y persiguiéndose. Serán los primeros en inaugurar la temporada de nidificación en la nueva Coipos? A prestar atención. Esta especie solía anidar acá.