Con Gonzalo Díaz encontramos este Cuclillo Canela muerto (suponemos que no hacía mucho tiempo porque no estaba rígido) debajo de uno delo vidrios del Centro de Interpretación. En ese momento nos dimos cuenta que detrás del vidrio había una planta. La conjetura es que el Cuclillo quiso volar hacia esa planta y se golpeó contra el vidrio. Gonzalo informó al personal de la RECS para que tomen las medidas del caso para prevenir estos accidentes.

El pijuí estaba trabajando con esmero para construir el nido

Un juvenil anillado estaba muy cerca de nosotros y no se inmutaba en absoluto. Buscaba algo de comer

Nos cruzamos con Graciela Neira y su grupo que nos avisaron que había un cuclillo chico en el Punto de Encuentro vocalizando. Al llegar lo escuchamos cantar y empezamos a buscarlo. A veces sonaba más cerca, a veces más lejos. Por lo tanto seguíamos el canto para encontrar a este cuclillo tan evasivo. Por suerte Gonzalo lo vio aunque apenas nos dio tiempo para echarle una mirada. Voló de entre las ramas y desapareció

Esta vuelta el benteveo nos sorprendió. Es la primera vez que lo registramos anidando dentro de una farola. Se sabe que pueden hacerlo en huecos grandes o en nidos semidestruidos de otras aves. Aquí se decidió por una farola.

El benteveo anida en la reserva y todos los años detectamos varios nidos. Son redondeados y se encuentran relativamente alto en los árboles. Pueden ser llamativos y desprolijos porque utilizan hilos o plásticos de colores